IXTLÁN DEL RÍO.- Las mandíbulas cortadoras de la potente Caterpillar se encajaron por entre muros y demás estructuras metálicas destruyendo en consecuencia todo lo que encontraban a su paso.
En un dos por tres, los locales del viejo mercado quedaron reducidos a nada y no fueron pocos las personas que atestiguaron este histórico momento luego que se ordenara la reanudación de la demolición de este inmueble que se construyó a mediados del siglo pasado.
En color amarillo, el armatoste no tuvo piedad al “pisar” el embaldosado del viejo mercado maniobrado por el joven operador quien simplemente recibió órdenes de los ingenieros, empezando por demoler la parte frontal de la finca.
El local de abarrotes que operaba en la esquina noreste y la tienda de novedades y regalos de la arista contraria fueron los primeros. De ahí se continuó hacia adentro iniciando con la fonda de la entrada, la marisquería de Felipe Minero, la carnicería de El Chipas Lerma y “así socesivamente” – como decía Cuatro Milpas –.
Frente al mercado y en las partes laterales, los dueños de los comercios colindantes al mercado salieron de sus negocios para presenciar esos momentos históricos. Conductores y peatones también realizaron un alto y tampoco fueron pocos los que extrajeron sus celulares para grabar la demolición del mercado.
Tabiques, enjarres, puertas metálicas y piso derruidos es lo que se observa ahora en ese espacio; pero se dice que esta misma semana se iniciará con el proyecto de construcción del nuevo mercado.
FOTOS: César A. Nieves Cosio
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