Dentro de dos o tres días inician las vacaciones de Verano para la mayoría de los estudiantes; y para las personas que trabajan los días de asueto son por lo general los sábados y los domingos; pero no son pocos los padres de familia que también dejan de laborar coincidentemente durante las vacaciones de sus hijos.
Por estas fechas muchas familias hacen un gran esfuerzo para salir fuera y viajar a otra ciudad, al campo o a la playa; o incluso a otro país.
A ellos les sugiero que no les ganen las prisas y los malos humores. Mediten, reflexionen: “¿Cuál es la razón por la que salimos?”.
La respuesta más segura será porque queremos pasar el tiempo con los nuestros, puesto que sabemos que éste es de los pocos momentos en el año que tenemos para descansar y convivir.
Como padres hay que aprovechar para conocer, platicar y divertirnos con nuestros hijos. ¡Que no nos gane la tecnología!; ¡No permitan que los aparatos cibernéticos nos roben este valioso tiempo!
Debemos ponernos estrictos y no dejar que cada quien esté ocupado con su celular, tableta, iPod, iPad, etc.
Una sugerencia es que los padres pongan las reglas y solo una hora al día, la misma para todos, para que revisen sus aparatos.
Propongan no sacarlos de la habitación y para que todos estén tranquilos guárdenlos solamente donde ustedes sepan.
Hagan que valga la pena tanto esfuerzo y gasto para poder salir. Hay que aprovechar este valioso tiempo y hay que proponernos estar de buenas y dar nuestra mejor cara.
Sería muy bueno que después de éstas vacaciones digan: “¡Ah, valió la pena!; me llevo mejor con mi hijo, con mi hija, con mi pareja!”.
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