Ixtlán del Río, julio 03- (Redacción).- En Ixtlán del Río, la jornada electoral se vio empañada por el enfrentamiento suscitado en la víspera entre panistas y perredistas con el saldo de al menos dos personas lesionadas y un detenido.
Uno de los lesionados resultó ser hijo del actual alcalde, Héctor Javier Sánchez Fletes y de la señora Luz Margarita González, candidata del PRD a la presidencia municipal, mientras que el recluso dijo ser el primogénito del candidato a diputado por el Partido Acción Nacional, Carlos Jaime Nolasco.
A escasas tres o cuatro horas, a través del facebook se difundió la imagen del hijo de Managüito y de la señora Luz bañado en sangre, producto de la supuesta agresión que sufrió a manos del primogénito del ingeniero Carlos Jaime, quien a su vez finalizó en la cárcel tras ser detenido por la policía por el delito de lesiones intencionales.
El incidente, según trascendió, ocurrió al filo de la una y media de la mañana del pasado sábado 02 de julio; y sobre los hechos hay dos versiones atribuidas a los seguidores de ambos partidos.
El origen de estos acontecimientos derivados de los apasionamientos políticos al parecer provienen de un grupo de jóvenes perredistas que vigilaban desde días antes una bodega, propiedad de la regidora Livier Uribe Ibarra y donde presumiblemente se resguardaban despensas e insumos agrícolas, producto de los apoyos federales que habían llegado a este municipio para presumiblemente promover el voto a favor de los candidatos del PAN
Se dice que estas acciones de vigilancia ocasionaron que el candidato a diputado Carlos Jaime Nolasco perdiera los estribos suscitándose en primera instancia una discusión verbal.
Cuentan que uno de los simpatizantes del PRD había maniobrado un vehículo echándose de reversa para ocasionarle daños a la unidad del ingeniero Carlos Jaime, quien presuntamente interpondría más tarde una denuncia ante la Agencia del Ministerio Público.
Pero el problema no paró allí, pues trascendió que los jóvenes perredistas huyeron hacia un conocido hotel que se ubica al poniente de Ixtlán, hasta donde llegaron después otros jóvenes del PAN, encabezados presumiblemente por el hijo de Carlos Jaime Nolasco.
El muchacho, furibundo por el atentado perpetrado contra su padre, habría tomado un bat de beisbol y con él golpeó los cristales de las puertas con la intención de herir a sus ocupantes, entre los que se encontraba el hijo del alcalde.
De apenas 17 años de edad, el hijo del presidente y de la señora Luz resultó con una herida cortante en el rostro por donde brotó abundante sangre, obligando a sus padres a internarlo en un nosocomio.
Poco después se supo de la captura del hijo de Carlos Jaime, dejando un ambiente tenso para la jornada electoral del domingo 03 de julio.
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