IXTLÁN DEL RÍO.- Con trabajo, aplicando criterios de flexibilidad, de razonamiento, pero sin caer en la blandura y con el reglamento en la mano, así es como el nuevo delegado de tránsito comisionado a Ixtlán del Río, Eugenio Aguilar Ibarría, intenta resarcir la mala imagen que dejó su antecesor.
Acatando las disposiciones de la superioridad, el citado servidor público tomó las riendas de la delegación de tránsito a principios de la semana pasada y siguiendo las recomendaciones básicas de respeto, cordialidad y tolerancia.
La primera encomienda fue buscar la coordinación inmediata con las autoridades municipales y con las corporaciones policiacas y de servicio que operan en este municipio.
La Delegación de Tránsito municipal, a raíz de los lamentables acontecimientos registrados el pasado mes de abril relacionados con el caso de Rosita, había suspendido sus servicios, y no fue sino hasta principios de la semana pasada cuando de nuevo abrió sus puertas.
El trabajo, sobra decir, se acumuló, pero poco a poco y bajo la batuta de Eugenio Aguilar, se ha salido al paso, aunque a veces se tenga que trabajar horas extras.
Limpiar la imagen de la delegación es una de las tareas a priori, pero a la par, el nuevo delegado de tránsito intenta darle mayor orden a la vialidad; pero también apela a la conciencia de los conductores a fin de que respetan el reglamento de tránsito; y hace énfasis en los motociclistas a quienes conmina a que usen el caso protector.
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