Ixtlán del Río.- A pesar de los malos augurios de pesimistas, el tradicional rompimiento de las Fiestas Patrias, en su edición 2011, resultó mucho mejor de lo que se pensaba; por lo que una vez más se confirma que las fiestas las hacen los pueblos, y que el ánimo y el jolgorio lo avivan las personas que participan con entusiasmo en las mismas.
Y bueno, con esa exaltación, henchidos de fervor cívico y de humor festivo, los ixtlenses se volcaron a las calles para sumarse a éste tradicional rompimiento, en una tarde-noche hermosa, de mucho colorido, de música, de pólvora, de belleza y de muchas otras cosas más.
Naturalmente, la avenida Hidalgo, o Calle Real, como aún se le conoce, fue cerrada a la circulación; y así, en lugar de artefactos rodantes se vio un mar de gentes, desde el cruce de las avenidas Hidalgo y Emilio M. González, hasta la Justo Barajas.
Seis de la tarde menos 25 minutos. La muchedumbre, apostada sobre ambas aceras, se dispuso a disfrutar de ésta alegoría. “¿Ya ves? ¡Quien te lo manda estar tan chaparra”, le dijo Bere a su amiga Marcela, burlesca.
Buen dinero debieron haber recaudado los “fotógrafos profesionales” que llegaron expresamente de Guadalajara, buscando engrosar sus bolsillos, utilizando su cámara instantánea.
El desfile fue encabezado por el presidente municipal, Héctor Javier Sánchez Fletes y su distinguida esposa, Luz Margarita González, resaltando también la presencia de Luis Fernando Quintero del Toro, presidente del Patronato de Fiestas Patrias, además, claro, de la recién electa Reina de las Fiestas Patrias Ixtlán 2011, “Mabby Primera” y sus dos princesas.
En el desfile participaron poco más de 100 carros alegóricos, en una maratónica algarabía que duró poco más de dos horas. Y afortunadamente todo transcurrió como se debía; con alegría, con entusiasmo. Un rompimiento con saldo blanco pues, y no como se andaba rumorando
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