AHUACATLÁN.- Indignación, coraje, tristeza, dolor y otros sentimientos similares es lo que embarga no solo a los que se encargan de la conservación y embellecimiento del andador que conduce hacia el Arca de Noé, sino a la sociedad en general; esto es debido a la inconsciencia e irresponsabilidad del que – o los que – derribaron los árboles que se plantaron en ese espacio, muy cerca del punto conocido como La Parota.
Al hacer un recuento de los daños, se supo que fueron ocho arbolitos de distintas especies los que fueron derribados. Y todo parece indicar que fue un camión el que pasó por encima de ellos, echando abajo todo un trabajo de cuatro años.
Lo anterior debió haber ocurrido anteanoche o en las primeras horas de ayer, pero no fue sino hasta en la mañana cuando se supo de este suceso que, con justa razón, provocó la indignación de los integrantes de la organización “Los Choninos”.
Sobre esto mismo, uno de sus principales fundadores, el regidor Asunción Peña señaló: “Mi espíritu siempre ha sido de ayuda, tratando de dejar rastro en Ahuacatlán como el primer grupo de labor social que se ha mantenido a través de la cooperación voluntaria”.
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“Nosotros – recalca – no dependemos de ninguna institución pública ni recibimos ayuda económica de nadie, criticados e incluso regañados; pero nada quebrará el espíritu de ayuda. Les garantizó que en lo personal aun después de terminar el cargo público que desempeño seguiré haciendo lo que hasta ahorita hemos hecho, tal como en los últimos cuatro años”.
Hasta el momento, se insiste, no se ha podido conocer la identidad del (o los) responsable (s); pero es obvio que se trata de un acto de inconsciencia e irresponsabilidad.
De cualquier manera, los activistas de “Choninos” de inmediato se pusieron manos a la obra y ayer mismo por la tarde se dedicaron a plantar nuevos árboles, espe4cíficamemnte nanches, guayabos y arrayanes.
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