AHUACATLÁN. – Fundada a inicios de este milenio, la Casa Hogar sigue brindando cobijo a los adultos mayores que así lo necesiten; principalmente a aquellos que carecen de familia o que ocupen de apoyos especiales; pero las limitaciones económicas siguen latentes y no ha sido fácil solventar las necesidades que se han ido presentando.Fabiola Bañuelos Osorio, su administradora, ha tenido que ingeniárselas para sacar adelante a este recinto que le brinda cobijo a los ancianos y no tan ancianos.
Actualmente se atiende a 13 inquilinos; la mayoría de ellos originarios de ésta ciudad; pero también hay algunos que provienen de los municipios vecinos. Incluso de Tepic; esto es por la buena atención que ahí se les brinda.
El huésped de mayor edad es don Martín Pérez, del municipio de Amatlán de Cañas; y el menor es Daniel González, nativo de Ahuacatlán; el primero de ellos con 97 años, y el segundo de 48. La edad y la procedencia de los otros 11 es variada.
Durante los primeros años de su creación la Casa Hogar admitía solamente a personas carentes de familia, sin ningún costo; pero de hace unos años a la fecha se pueden aceptar a adultos que necesiten cuidados especiales, siempre y cuando la familia pague alguna cuota, pudiera decirse de recuperación.
Sobre las carencias, Fabiola explica que son muchas; aunque la prioridad es proporcionarles alimentos y atención médica; sin embargo, se insiste, esto no ha sido fácil, debido entre otras cosas a la falta de recursos.
Algunas instituciones y organismos que anteriormente colaboraban con algún subsidio, de pronto dejaron de hacerlo; tal es el caso de los Hijos Ausentes, quienes retiraron el apoyo hace dos años; aunque existen personas altruistas que siguen aportando alguna cuota fija de manera voluntaria, destacando también el apoyo que otorgan los integrantes de la agrupación denominada “Brothers of Seatle”; la mayoría de ellos residentes de Washington. E.U.
También se realizan actividades como venta de alimentos y rifas, como la que se realizó en fechas recientes en la que se rifaron 5 mil pesos en efectivo y un horno de microondas y cuyos premios por cierto recayeron en Martín Carmona y en Chuyín Bernal; todo bajo un manejo transparente.
Los fondos recabados sirven también para pagar los sueldos de las tres enfermeras y los dos enfermeros, así como de los dos de intendencia y la cocinera; pero no se han podido solventar otras necesidades, como es la pintura de muros, reparación de techos, etc.; por eso es que la administradora lanza un exhorto a aquellas personas que así lo deseen, para que se sumen a esta causa y apoyen a la Casa Hogar, ya sea con dinero en efectivo o en especie.
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