ZONA SUR.- Lupita tuvo una noche no muy agradable. Se levantó al menos cinco veces para ir al baño. La intensa diarrea prácticamente no la dejó dormir; e incluso se vio obligada a pedir permiso para no acudir a su trabajo al día siguiente.
Pero así como ella, han sido muchas las personas que a últimas fechas han sido presas de este mal, es decir de las enfermedades gastrointestinales; esto es debido al calor y al temporal de lluvias, pues es cuando los alimentos se descomponen con mayor facilidad, si es que no se asumen las medidas preventivas.
Las enfermedades diarreicas afectan por ahora lo mismo que a los niños, que a los jóvenes y adultos; por eso es que las autoridades de salud recomiendan medidas higiénicas, así como evitar la ingesta de alimentos en la calle.
Esto último fue lo que al parecer ocasionó el mal estomacal de Lupita, quien el día anterior se había trasladado de Ahuacatlán a Ixtlán, donde se zampó unos taquitos “deliciosos” que compró en una fonda de la zona centro.
Las consultas en los sanatorios públicos y en las clínicas particulares se han visto incrementadas debido a estas enfermedades, y esto se atribuye al aumento de la temperatura, porque es más fácil que existan alimentos contaminados y se reproduzcan bacterias y las personas que lo consumen pueden enfermarse, según lo explicó el doctor Oscar Saúl Martínez Parra.
Explicó que la presencia de tres bacterias como salmonella, shigella y campylobacter en alimentos contaminados pueden producir en los niños mayores evacuaciones y disminución de su consistencia, en algunos casos vómito, mareos y fiebre.
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