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No es lo mismo. Su casa de Hidalgo 319, luce desolada. Ya no cruza la puerta, ni abre la cochera, y mucho menos atiende pacientes con problemas de caries o construcción de puentes dentales.
El doctor Ramón Barragán Parra, un ciudadano ejemplar, profesionista respetado, rotario sobresaliente, funcionario público como presidente municipal del año 1970 a 1972 que entre sus obras destaca la rehabilitación y transformación de lo que se llamaba el Llano, aunque aún así se le conoce, en una Unidad Deportiva Roberto Gómez Reyes.
Ramón también fue un apasionado deportista del frontenis y que incluyó en dicha obra dos canchas de un deporte que desde joven siendo estudiante de la secundaria en la ciudad de Tepic, le despertaba curiosidad porque pasaba en el trayecto a la escuela y se quedaba viendo jugar a los hombres y mujeres con raqueta o la mano y que golpeaban secamente una pelota en un muro tratando de no perder el rebote respetando los límites y aprovechando la pared para despistar al adversario.
Es como el tenis que sin red se utiliza el frente encementado como si fuera el espejo de tu golpe y tus movimientos y el instinto vertiginoso y la tensión especial de dominar velocidad y puntería.
Ingreso por la puerta más cercana a este lugar donde se lleva a cabo el torneo relámpago de frontenis por parejas que el comité organizador encabezado por el profesor Pablo Torres Sánchez, que aparte de ser nuestro cronista municipal, también es amante del frontenis; lo acompaña Francisco Jaime en la mesa verde del sorteo entre marcadores y hojas con las llaves de los juegos. Atrás dos lonas con referencias relativas al gobierno.
En este sencillo torneo relámpago se le rinde homenaje al doctor Ramón Barragán por tanto que realizó, gestionó, en este espacio tradicional y forma parte de la historia de la comuna, que esperamos pronto le sea rendido un homenaje completo como marca el protocolo y el cariño de sus coterráneos.
Se encuentra el presidente municipal Pepe Alvarado y el coordinador del deporte Juan Carlos Zúñiga. Estamos en una de las esquinas de las instalaciones que han vivido una evolución desde sus orígenes pasando de los tiempos militares, lienzo y estrado de madera para los bailes juveniles a principios del siglo XX; de los juegos tradicionales de las fiestas patrias como el palo encebado; de los festivales artísticos hasta equipos profesionales de tercera y segunda división bajo las luces artificiales.
Un Llano que sigue siendo testigo de caminantes y corredores del amanecer, futbolistas de diferentes categorías y atletas que utilizan los aparatos para constitución del cuerpo y detener lento los años.
Los participantes están listos y a continuación las parejas: 1.-Los hermanos Miguel y Antonio Vega; 2.- César Alejandro Gómez Marmolejo y José Ramón Gómez Marmolejo; 3.- Jesús Romero y José Parra; 4.- Kevin Martínez y Carlos Valdovinos; 5.- Marco Antonio Martínez Hernández y Luis Fernando Rivera Iriarte; 6.-Gilberto Parra y Gregorio Lara. El presidente da el saque inicial a las diez quince de la mañana y pronto la pelota sacude las paredes verdes y adentro los gladiadores de la raqueta tras la malla como si fuera el coliseo de la inmortalidad.
El maestro Pablo nos recuerda que por un vendaval en el año 1977 se cayeron las dos canchas de frontón y que años después por el esfuerzo de muchos se pudo erigir de nuevo escenarios con sus líneas amarillas.
La pareja ganadora del primer lugar fue la número 5 y los premios de seiscientos pesos, medalla y reconocimiento a cada uno. En segundo lugar la pareja 2, sus cuatrocientos pesos, medalla y reconocimiento a cada uno.
Mención especial que gracias a la donación de Alfredo “El Feo” Ramírez se le entregó al mejor jugador del torneo Marco Antonio Martínez, la raqueta que fuera del jugador nacional apodado “El Andamio”, por parte del jurado conformado por Antonio Ruiz, Alfredo Ramírez y Abraham Flores.
Estuvimos en una mañana redonda y recordando con mucha melancolía aquellos años y nos llega en la memoria como una viento agradable la imagen de Ramón Barragán que no se ha ido para siempre.
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