AHUACATLÁN.- Un equino que pastaba en las corraletas de la plaza de toros “El Recuerdo”, sorpresivamente cayó a un pozo de aproximadamente seis metros de profundidad, situación que ocasionó la movilización del personal de la dirección municipal de protección civil, policía municipal y otros voluntarios.
Lo extraño del caso es que este animal se fue abajo al pisar una lámina que dejó al descubierto una superficie o hueco de 80 centímetros de ancho por 80 de largo.
Los que ayudaron a su rescate no se explican cómo es que el caballo cupo en esa circunferencia para caer hasta la profundidad del pozo de aproximadamente seis metros de altura y el cual es utilizado como aljibe y desagüe de la plaza de toros.
El jamelgo que se identifica como “Espiri”, es propiedad de la familia Dueñas Monteón, y fue precisamente uno de sus miembros el que descubrió el suceso luego de acudir a las corraletas para atender al animal
Al inspeccionar el área se dio cuenta de la ausencia del caballo, pero pronto pudo dar con él al revisar dentro del pozo.
El equino por poco y se ahoga pues apenas sí podía sacar la cabeza por encima del agua; y ante esa situación se solicitó el apoyo de los cuerpos al principio mencionados, quienes se abocaron en primera instancia a bombear el agua.
Imposible fue rescatarlo por sí solos. Fue necesario recurrir a la “páchara” – maquinaria pesada – a fin de sacarlo de ese hoyo profundo. Al perecer el animal presentó posteriormente una fuerte fiebre, aunque afortunadamente no resultó con fracturas.
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