IXTLÁN DEL RÍO.- Donde quiera se cuecen habas. Y dicen que en la Secretaría de Salud, al igual que en otras instituciones del sector público también hay grupos o figuras que se mueven en el mundo de la política y que logran llevar agua a su molino por medio de ilegalidades y atropellos.
El sur del estado no escapa a esta situación. La semana pasada por ejemplo fuimos abordados en ocasiones distintas por al menos dos personas, quienes se quejaron de algunas situaciones a todas luces reprobables, como es el hecho de negar los medicamentos a personas que se identifican con grupos políticos no afines a la persona que se encarga de surtirlos.
Esto, como se observa, es politizar el servicio a la ciudadanía, tal vez por compromisos ante el fulano o zutano que lo ayudó a conseguir el puesto, y eso ¡definitivamente no se vale!
Porque efectivamente, en ese sector hay personas, funcionarios o ex funcionarios públicos que de alguna manera influyeron para colocar a sus incondicionales en algún cargo y que obviamente “trabajan” pensando en su futuro político, siendo de esa manera como maniobran a su gusto por medio de sus alfiles.
Para que nos diera su punto de vista respecto a esta situación platicamos vía telefónica con el Director de Atención Médica de la Secretaría de Salud, Luis Emilio González Macías, y éste nos comentó que “politizar la salud en hospitales es un pecado”. “No debe existir – dijo – preferencia de apoyar al paciente por ser de cierto partido, de alguna religión o porque sea pariente de algún político o doctor. Todos los pacientes son prioridad y merecen un trato digno”, opinó.
Luis Emilio González admitió por otro lado que en los hospitales de la zona sur hacen falta médicos y enfermeras para poder atender mejor a la población, y así mismo reconoció que solamente hay un doctor de urgencias, esto en el hospital de Ixtlán, mientras que en Amatlán de Cañas, Jala y Ahuacatlán no se proporciona ese servicio de urgencias.
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