Piden ayuda para doña Irene Ruvalcaba

JALA-JOMULCO

La situación de la familia Aguilar Ruvalcaba no es tan agradable; más bien es de muchas dificultades, principalmente en el tema económico y de la salud; pero a últimas fechas las cosas se complicaron todavía más debido a que doña Irene fue presa del COVID.

Afortunadamente la señora Ruvalcaba poco a poco se ha ido recuperando; sin embargo este proceso les ha costado mucho, pues las condiciones económicas de la familia son bastante limitadas.

Ellos radican en el poblado de Jomulco –municipio de Jala-. Viven con muchas carencias y la señora Irene ha tenido algunas recaídas, situación que ha orillado a su familia a buscarle por donde sea para su restablecimiento.

Algunos vecinos le han ofrecido apoyo. Tal es el caso de Karely, quien está apelando a la buena voluntad de los pobladores para que se les brinde ayuda económica, considerando además que doña Irene es viuda y mayor de edad, además de tener dos hijas que son madres solteras.

La familia necesita de recursos para comprar medicamentos costosos y que sea atendida por médicos especialistas; además requieren comprar alimentos para poder subsistir durante esta crisis.

“Considero que es momento de apoyar. Nuestro pueblo se caracteriza por ser solidario con las personas. Así que espero contar con su gran apoyo.
Hoy necesitan de nosotros; no sabemos cuando podamos necesitar de los demás”, señala Karely en un posteo que se puede leer en su cuenta de Facebook.

Y agrega: “Puedes donar lo que sea tu voluntad, dinero o alguna despensa en mi domicilio, calle Cerro de Onix No. 99-b, para posteriormente hacer la entrega personalmente.

Ella misma se propuso hacer una rifa de una licuadora con un costo de 15 pesos por boleto. Los interesados en ayudar a la familia o participar en esta rifa pueden llamar directamente con ella al tel. 324-111-66-50; o si se tiene alguna duda también pueden llamar a los teléfonos de las hijas de la señora Irene: 324-103-76-88 o 332-413-79-23. “De antemano muchas gracias”, concluye Karely.

Ojalá y que haya por ahí algunas almas bondadosas dispuestas a ayudar a esta familia, por que en verdad ¡lo están necesitando!