AHUACATLÁN. – El cronista municipal Rubén Arroyo ha pedido el apoyo para que los usuarios de Facebook lo secunden en el salvamento de lo que él considera patrimonio histórico de esta comuna, consistente en desechar el proyecto para el establecimiento de una tienda OXXO en la esquina de la avenida 20 de Noviembre esquina con Aldama, lo que en otrora fuera “La Casa de Material” y “El Molino de don Félix”.
Sus argumentos expuestos en su muro de Facebook, han desatado una ola de polémica no solo con respecto a la lesión al patrimonio arquitectónico de Ahuacatlán, sino al comercio local.
No obstante, y aunque Arroyo Arámbul indica que a las autoridades no les importa el patrimonio histórico, en el edificio que queda justo de frete a este inmueble en disputa, es decir, en la presidencia municipal, se han puesto óbices para que la tienda no se asiente en ese lugar, principalmente, debido a que frente a ella quedaría la escuela Fray Pedro de Gante y el templo de La Inmaculada, así lo señaló una fuente oficial del Ayuntamiento que quiso reservarse el nombre durante una entrevista para El Regional.
La fuente precisó que abogados de la firma de la tienda OXXO, cumplieron con los requisitos que marca el reglamento municipal para este tipo de establecimientos, pese a que en reiteradas ocasiones se les instó a que buscaran otra ubicación, pues como se sabe, una tienda de esta naturaleza se dedica a expender alcoholes las 24 horas del día; por lo que se les sugirió que procuraran a la directora del plantel escolar para que les otorgara su anuencia, la cual, parece ser que accedió.
Por otro lado, también el INAH (Instituto Nacional de Antropología e Historia), hizo lo propio para el extrañamiento del propio presidente municipal Chuyín Bernal, quien ahora busca que el párroco Pedro Guzmán intervenga para que debido al templo se disuadan de construir el OXXO.
Otra medida, explica la fuente, es que ya están en tratos con el propietario de la licencia de alcoholes en este lugar para que ésta pase a manos del Ayuntamiento y, aunque se pagaría cierta cantidad al año, no se vendería alcohol en la tienda.
Como sea, el gobierno de Chuyín Bernal está atado de manos por el propio reglamento, pues aunque autoridad, está sujeto a lo que dictaminen las leyes, y aunque negaran la anuencia, en un juicio el Ayuntamiento quedaría expuesto y perdería ante los abogados del OXXO.
La vía más legítima, opinan los asesores jurídicos, sería solicitar la intervención del INAH, y otras instancias del estado.
Publicación completa de Rubén Arroyo:
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