
AHUACATLÁN.- No hay playas ni hoteles Cinco Estrellas. Los barcos, lanchas y canoas tampoco son su “fuerte” como ocurre en la zona costera. No obstante, Ahuacatlán cuenta con un potencial turístico que ya lo quisieran otros municipios.
Y así, las Agencias de Viajes y empresas dedicadas a la promoción turística ya incluyen a este punto en sus paquetes, lo cual a su vez ha ocasionado que los grupos de excursionistas, tanto nacionales como extranjeros, poco a poco fijen su vista en los atractivos que el pueblo de Ahuacatlán ofrece.
El ecoturismo que se practica en Ahuacatlán se ha convertido pues en una alternativa más para los visitantes, pero también resalta el turismo cultural. Sus reconfortantes balnearios, como el de Uzeta, Acatique y Las Tinajas – en Santa Isabel – son solo una mínima parte de los encantos naturales que posee este precioso rinconcito situado en la zona sur de Nayarit.
Los Templos de la Sagrada Inmaculada y el de San Francisco de Asís también forman parte de sus atractivos, junto con su imponente Escalinata del Cerro de la Cruz, sus Portales, sus Plazas y Jardines y todo su Centro Histórico, aunado a la hospitalidad de su gente, ha arrojado buenos dividendos en el renglón turístico.
De cinco años atrás, era poco común observar algún extranjero, un gringo, un francés, un alemán; pero de ahí en adelante las cosas han cambiado. Ahora es más frecuente ver a forasteros deambular por las calles, con cámara en mano y mochila al hombro.
Y uno de los sitios que más seducción causa, es sin duda alguna el Volcán El Ceboruco. Subir a la cima de este enorme coloso que se alza a poco más de Dos Mil 100 metros sobre el nivel del mar, es realmente fascinante. Aspirar el aire puro y el aroma que despiden los árboles de pino y roble constituye una nueva forma de disfrutar la naturaleza. Sus fumarolas, el cráter, las antenas, su flora, su fauna, sus piedras volcánicas, ¡Todo!, todo eso es lo que ha ocasionado que el turismo cada vez más fije su vista en Ahuacatlán.
Otros valores que se agregan son su pasividad y el estilo fraternal y amable de su gente. Y todo esto, aunado a los atributos señalados con anterioridad, se insiste, han propiciado que incluso que los turistas contemplen la posibilidad de invertir en bienes raíces, lo cual a su vez hace que haya más captación de divisas.

Discussion about this post