Report-arce
Bulliciosos, se interrumpían entre ellos y la memoria todavía ardiente, conservaba imágenes que trascenderán en sus vidas. Son adolescentes de diferentes grados y turnos de la escuela secundaria Amado Nervo. Leí sobre la gesta deportiva en páginas y muros de Facebook, cuando publicaron el logro a nivel estatal, pero por diversos motivos perdí lo que siguió, hasta que el maestro Juan José García, me preguntó que si ya había escrito sobre la selección de futbol que obtuvo el quinto lugar nacional en el torneo de la marca refresquera Coca Cola.
Estoy en el salón y ya reunidos los jóvenes me escuchan, portan el uniforme beige y no puedo evitar con un dejo de nostalgia comentarles que fui profesor y que me gustaría que se concentraran en las preguntas para el reportaje del periódico Express de Nayarit y el Regional del Sur. Me siento en una butaca y abro el cuaderno que ya tiene pocas hojas útiles y los acompaño desde el comienzo. Me rodean los más interesados y les pido que me apunten sus nombres y la posición que juegan en una hoja suelta y van lentamente llenando y preguntan que cuándo saldrá.
Un alumno llamado Mauricio se compromete mandarme la foto, que elijo, a mi correo electrónico. Sacan sus recuerdos por puños y pronto les sugiero que no se quiten las palabras que como nunca los han entrevistado, se requiere que simplemente se dejen llevar por la pregunta y mueven la cabeza afirmando que entendieron.
En el mes de septiembre José Manuel García convoca a 23 jugadores para elegir a los mejores en una visaría. Sólo asistieron 20 y de estos fueron seleccionando a los que reunían las cualidades de jugar en conjunto. Las tardes, en la unidad deportiva Roberto Gómez Reyes, se gastaban corriendo, pegándole al balón, entrenando para ganarse un lugar. Participan en un torneo juvenil en nuestra ciudad para darle consistencia y valor al equipo.
Fueron dos veces campeones y el último subcampeón. Inicia el recorrido en el mes de marzo cuando le gana en casa al equipo de Jala por dos a cero con goles de Jesús Vélez y Arturo Lichenwalter. A la semana siguiente en uno de los campos de la UAN, en Tepic le ganan a la escuela Técnica 36 por cuatro goles a cero con los cuatro de Jesús Vélez.
En la semifinal les toca competir con Acaponeta y cuando faltan dos minutos para que se termine el partido y perdiendo, anota Jesús Vélez el gol del empate. Euforia, brincos y gritos a raudales porque los nervios destrozaban a la porra. Llegaron los penales y ganan porque el portero Enrique Escalante, detiene dos penales.
Se prepara la final para el mes de abril y comandados ya en el trayecto por Marco Antonio Zavala Rivas y su auxiliar Marco Antonio Rodríguez, los jugadores viven un nudo y mundo de emociones. En una de las canchas de la UAN, de nuevo en Tepic están listos, tensos para competir el pase a la región occidental del torneo contra la Técnica 51.
En un juego cerrado y complicado llegan al final empatados cero a cero y vienen los tremendos y enigmáticos penales y anotan Christopher Valenzuela, Arturo Lichenwalter, Juan Diego Castañeda y Jesús Vélez. Los contrarios fallan dos, con la sagacidad y cualidades del portero Enrique y logran el ansiado pase histórico a la siguiente fase y esto es la colectividad azorada de la ruta para viajar a Guadalajara.
El lunes en los honores, el director Humberto Ibarra Delgado, los felicita, llueven los aplausos en el patio cívico entre árboles. Recibe la escuela un balón firmado por los héroes y el trofeo de la copa Coca Cola. Y los deportistas reciben uniformes completos en rojo y negro con chamarra y pantalón. Y se acerca el mes de mayo y los está llamando la gloria, el honor y la vivencia imborrable que significa no dormir por culpa de la ansiedad, la incertidumbre. Lo desconocido…
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