ZONA SUR. – Los violentos acontecimientos que se han registrado durante los últimos días en la capital nayarita, mantienen azorados no solo a los habitantes de Tepic, sino también a los de la zona sur del estado; y aunque las autoridades gubernamentales y la propia Fiscalía sostengan que existe vigilancia plena, el temor no se disipa.
Margarita Salas es madre de dos hijos. El menor de ellos enfrenta una enfermedad congénita. Radica en Ixtlán y tiene una cita médica qué cumplir en la ciudad de Tepic; sin embargo, anoche aseguró que prefería posponer esa cita tras considerar que era riesgoso viajar a la capital “debido a las balaceras”.
Leyda Mariscal es otro ejemplo. El pasado viernes debió viajar a Tepic para unos trámites de su pensión. No lo hizo. Prefirió quedarse en Ahuacatlán hasta que cesen los enfrentamientos.
Y así como Margarita y como Leyda, muchas otras personas sienten y tienen temor desplazarse hasta Tepic. Creen que pudiera ocurrir hechos violentos como los que se suscitaron la semana pasada.
Con todo y todo, no culpan de nada ni a los cuerpos policiacos, ni al Ejército y ni siquiera a la Marina, sino a la disputa por el poder de las bandas criminales.
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