¡“El Chihuahua” se llevó la tarde!

EN LA CORRIDA DE HOY
LA PASARELA POLÍTICA NO PODÍA FALTAR

AHUACATLÁN.- En hombros y por la puerta grande, fue así como Antonio García “El Chihuahua” salió de la plaza de toros “El Recuerdo” al convertirse en el triunfador de la corrida de esta tarde tras cortar cuatro orejas y un rabo, en dos faenas de valor y mucha cabeza.

Vestido en azul cielo y negro, El Chihuahua alternó con Alfredo Ríos “El Conde”, quien a su vez obtuvo dos orejas, en tanto que el rejoneador Rodrigo Santos sumó también a su cuenta dos apéndices.

Casi llena la plaza. Tarde lluviosa, húmeda; y la pasarela política que no podía faltar. Ahí estuvieron Raúl Mejía, Toñito Echevarría y Polo Domínguez, pero fueron Manuel Cota y Layín los más coreados.

El rejoneador Rodrigo Santos se vio fenomenal con el caballo. Dos toros difíciles que le impidieron cuajar una tarde redonda, aunque al final logró aumentar su palmarés con dos orejas.

Alfredo Ríos “El Conde”, en oro y negro, logró en su primero cuajar una buena faena. Mutiló las dos orejas a “Pajarito”, pero en su segundo no tuvo mucha suerte. Se vio apático ante “Pajarito” y erró con la espada.

Antonio García “El Chihuahua”, simple y sencillamente fenomenal. Dos faenas estupendas, más aún con su primero al que le cortó las dos orejas y el rabo. La gente exigió la misma cuota en su segundo, pero el juez no cedió y solamente le concedió dos orejas.

Los tres demostraron en el ruedo su calidad taurina en la plaza de toros El Recuerdo, la cual sin embargo no lució el lleno que se esperaba. Hubo algunos huecos en los tendidos. La humedad manifiesta desde en la víspera y las amenazas de lluvia ahuyentaron a no pocos aficionados.

El Secretario General de Gobierno, Pepe Espinosa, llevó la representación del gobernador Roberto Sandoval, pero fue patente la presencia de algunos presidentes municipales, legisladores locales y varias figuras del mundo de la política.

El triunfador, se insiste, fue “El Chihuahua”, quien toreó por arriba y por abajo, de rodillas, muy pegado al burel. ¡Estupendo con las banderillas!… Demostró que si algo tiene, además de valor, temple y estética, es cabeza fría para ver, entender y resolver las complicaciones que pueden presentarle los cornúpetas.

Aguantó y ligó dos faenas cimentadas en la derecha, con muletazos tersos y profundos, haciendo que el público le coreara todo cuanto hizo, que además fue bien hecho. ¡Hermosas tafayeras! Para su fortuna cortó las cuatro orejas y un rabo, ¡Muy merecidas por cierto!