IXTLÁN DEL RÍO. – Un grupo de alumnos de la Unidad Académica del Sur en Ixtlán del Río (UASI) está pidiendo la motivación y fundamentación jurídica que llevaron a la doctora María Dolores Cossío Rivera, coordinadora de dicho plantel, así como a parte del personal docente, para cobrar una cuota interna de 300 pesos; la cual, dijeron ellos, es ilegal y arbitraria.
Personalmente los estudiantes presentaron un documento a El Regional, así como una grabación de audio, dónde un alumno conversa con Yoyis Cossío para hacerle esta misma solicitud de la cuota que – según su apreciación – debería ser voluntaria, y no obligatoria y condicionada como presuntamente lo está haciendo la coordinadora de la UASI.
El caso es que en dicha grabación se puede escuchar claramente que la doctora en derecho le indica al alumno y otros más que se encuentra escuchando, que la cuota forma parte de un acuerdo intramuros, y que el alegato de que la educación debe ser gratuita, conforme al artículo 3° constitucional al que ellos se acogen, incluye a la educación superior, y no como lo afirma la doctora Cossío, quien niega que el costo de estudiar en una universidad debe ser gratuita.
Pero el problema no es sólo jurídico, sino esencialmente burocrático, pues se ha dado la orden de que aquellos alumnos que no paguen los 300 pesos no tendrán derecho a examen, y más que eso, algunos maestros como Luís Alberto Flores Becerra, coordinador de la Facultad de Derecho, no le toma en cuenta las asistencias a los alumnos que no han pagado la cuota interna.
Por su parte, la doctora Cossío Rivera indica que este pago se implementó desde hace años a fin de cubrir gastos para el mejoramiento del plantel, desde la adquisición de nuevo material educativo como cañones, pintura, y próximamente persianas; hasta artículos de limpieza.
Toda esta situación que mantiene inconformes a una parte de los alumnos, se agrava con los recientes escándalos de desfalco y corrupción por los que atraviesa la máxima casa de estudios. Por lo que además de pedir que dichas cuotas se hagan realmente voluntarias; los futuros abogados exigen un posicionamiento a su coordinadora y a los maestros para que se pronuncien en contra de los actos de impudicia que se han venido cometiendo desde la rectoría. El más reciente, el del incendio en un edificio dónde se resguardaban documentación financiera.
Es importante destacar que la coordinadora Yoyis Cossío, dice contar con el respaldo de otros profesores y funcionarios de la UAN para pedir el cobro de la cuota interna, sin la cual, no se pudieran realizar muchas cosas en beneficio de los mismos alumnos. Con todo y eso, ella misma dice en el audio que está en manos de El Regional, que a aquellos alumnos que lo soliciten por no contar con el dinero suficiente para desembolsar los 300 pesos, ella está en la disposición de condonar el pago de la cuota.
Empero, los alumnos no se niegan a pagarla, sino únicamente piden una explicación jurídica, se transparente la aplicación del recurso recaudado, y no se tomen represalias como el negarles el derecho al examen y la asistencia que, dicen ellos, tienen derecho desde el momento mismo en que pagan la inscripción y comprende todo ello.
Tocante a la investigación que hizo El Regional, por su cuenta, se sabe que este tipo de cuotas se cobran desde el preescolar y hasta el bachillerato, pero valiéndose de la Asociación de Padres de Familia a fin de eximir a las escuelas y al gobierno, del cabal cumplimiento del artículo 3° constitucional.
Se trata, pues, de una norma consuetudinaria o de costumbre, que hasta el nivel superior no tiene fundamento legal. Y en el caso particular del reglamento de pagos de la Universidad Autónoma de Nayarit, un experto dice que no contempla dichas cuotas y que además, el cobro varía mucho de una unidad académica a otra, dependiendo de las necesidades del plantel. Como sea, en la UdeG (Universidad de Guadalajara); así como en la UNAM, se sabe que los alumnos pagan cuando mucho 100 pesos semestrales por inscripción. Sin más.
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