Vecinos y habitantes de barrios y colonias claman por la pronta conclusión de los trabajos.
AHUACATLÁN.
La rehabilitación de drenaje y agua potable en la calle Aldama, específicamente en el tramo que comprende las calles Ismael Zúñiga y Reforma, ha generado inconformidad entre los vecinos y habitantes de la zona.
Tanto los residentes de los cuatro barrios tradicionales de la ciudad como de las ocho colonias aledañas piden que los trabajos avancen más rápido, ya que este tramo lleva más de tres meses cerrado a la circulación, afectando el tránsito vehicular y causando molestias generales.
A pesar de que los ciudadanos reconocen los beneficios que traerá la obra, como la eliminación de los encharcamientos gracias a la construcción de alcantarillas para el desagüe de aguas pluviales, la demora en su conclusión ha empezado a desesperar a la población.
Hasta el momento, no se ha informado públicamente sobre los motivos del retraso o las acciones pendientes para finalizar los trabajos.
La rehabilitación incluye no solo la modernización de la red de drenaje y las descargas domiciliarias, sino también la renovación de la red de agua potable, lo que representa una mejora significativa en la infraestructura urbana.
Sin embargo, mientras esto ocurre, los habitantes insisten en que las autoridades y las empresas responsables aceleren el paso para minimizar los inconvenientes.
Por ahora, los vecinos esperan que esta situación sea atendida con urgencia, pues aunque el resultado final promete solucionar problemas históricos en esa área, el presente les exige mayor rapidez en la ejecución de la obra.
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