AHUACATLÁN
De manera sorpresiva los habitantes de Ahuacatlán conocieron la nada agradable noticia relacionada con los fallecimientos de Raudel González Zepeda y de la señora “Concha” Medina, acaecidos ayer jueves en las primeras horas del día.
Nacido en la localidad de Las Guásimas hace poco más de 38 años, el buen Raudel fue un hombre que gozaba de mucha estimación tanto en la zona rural como en esta cabecera municipal, donde venía radicando desde hace algunos años.
La sencillez, el trabajo y su conducta extrovertida fueron parte de sus cualidades; por eso es que mucha gente llora su partida; pero más aún su mamá, así como su esposa Fabiola Barrera y sus dos hijos, Alexa, de 15 años, y Gasset, de tan solo tres meses de edad.
Todo parecía normal, más de pronto fue presa de una enfermedad que orilló a sus familiares a internarlo de urgencia en el hospital de Ixtlán. Las cosas se empezaron a complicar y se abrazó la posibilidad de trasladarlo a Guadalajara, sin embargo sus condiciones de salud se agravaron repentinamente, falleciendo en las primeras horas.
Raudel fue sepultado ayer mismo por la tarde en medio del dolor de su mamá, de su esposa, hijos, familiares y sus múltiples amigos, muchos de los cuales lo despidieron hasta su última morada.
Concha Medina, en tanto, no pudo prolongar su vida tras entrar en esa debacle que inició hace algunas semanas debido a un problema orgánico. Una embolia fue el principio de su fin. El 30 de diciembre fue hospitalizada; primero en Ixtlán, luego en Tepic.
Sus fuerzas fueron mermando y, pese al esfuerzo de los doctores ya no se pudo recuperar, falleciendo también ayer por la mañana cuando era conducida a una clínica de Ixtlán
De 60 y tantos años, Concha llevaba alrededor de 15 años viuda luego del fallecimiento de quien fuera su compañero de vida, Javier Robles, al lado del cual procreó a “Javicha” y al profesor Omar, ambos de apellidos Robles Medina.
Su cuerpo se encuentra por ahora en una conocida agencia funeraria. Hoy viernes será entregado a sus familiares para su velación y mañana sábado por la tarde se le conducirá hasta su última morada, en el panteón de esta ciudad. DESCANSEN EN PAZ.
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