JALA.
Luego de darse a conocer la semana pasada el comunicado que envió el gobierno municipal respecto a la cancelación de la Feria del Elote Jala 2020, las reacciones de la ciudadanía así como de los hijos ausentes que por circunstancias del destino residen fuera de este terruño, no se hicieron esperar; pero la gran mayoría se pronunció a favor, toda vez que consideran que “la salud es primero” y que “ya vendrán tiempos mejores”.
La cancelación de esta Feria se deriva de un acuerdo consensuado durante una reunión de Cabildo y en donde el presidente Carlos Carrillo, junto con la síndico y los regidores del trigésimo octavo Ayuntamiento, hicieron un análisis de la situación por la que pasa este municipio debido al coronavirus, llegando a la conclusión que era contraproducente llevarla a cabo, además de que existen lineamientos y normativas expuestos por los gobiernos estatal y federal, así como por las autoridades de salud.
El alcalde y los regidores admiten que ésta fue una decisión difícil, pero afirman que estas acciones coadyuvarán a mitigar y a contener la transmisión del COVID-19 en el municipio, al mismo tiempo que se reduce la movilidad.
La diversión, la pachanga, los eventos masivos como el certamen de belleza, encuentros deportivos, bailes, rompimiento y concurso de la Feria del Elote, incluyendo desde luego la fiesta principal del 15 de agosto, quedan postergados para el próximo año y así lo entiende la mayoría de los jaleños.
Los comerciantes de la localidad obviamente dejarán de percibir los ingresos que suelen generarse durante estos días. Lo lamentan. También el gobierno municipal expresa su pesar por la cancelación de la Feria del Elote Jala 2020; “pero sería una gran irresponsabilidad celebrarla”, sostienen.
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