Una travesía de retos, devoción y esperanza.
IXTLÁN DEL RÍO.
Entre subidas y bajadas, recorriendo caminos sinuosos y enfrentando los desafíos del frío intenso de la madrugada, más de 200 peregrinos de Ixtlán continúan su andar rumbo a Talpa de Allende, Jalisco.
La travesía no es sencilla: además de la fatiga, deben estar atentos a los riesgos de picaduras de animales ponzoñosos y a las condiciones cambiantes del camino.
Muchos de estos fieles emprendieron el recorrido el pasado domingo, mientras que otros, con su «burrita» en mano y su mochila al hombro, partieron el lunes en las primeras horas.
Cada jornada es distinta, marcada por el clima y las circunstancias, pero lo que nunca cambia es el objetivo, impregnado de fe y devoción: rendirle tributo a la Virgen de Talpa.
Está previsto que los peregrinos de Ixtlán arriben a su destino este viernes.

A su llegada, la delegación crecerá aún más con la incorporación de aquellos que acuden en bicicleta, moto, autobús, carro particular o incluso a caballo.
Hasta el momento, no se han registrado percances mayores en el trayecto, lo que permite que esta expresión de fe y sacrificiocontinúe avanzando con el mismo ímpetu con el que inició.
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