La sequía ha devastado los campos, pero la esperanza persiste.
JALA.
Los campesinos de Jala esperan con ansias el fin de la sequía y la llegada del temporal de lluvias de 2024.
Este año, los agricultores confían en que las lluvias sean benévolas, a diferencia del año pasado cuando el mal temporal provocó pérdidas significativas.
Actualmente, los campos agrícolas del municipio, especialmente en la cabecera, están devastados por la falta de lluvia.
El cielo y los montes lucen grises y resecos y, a pesar de la desesperante sequía, los agricultores mantienen la esperanza de que pronto caigan las primeras lluvias para poder sembrar su «maicito».
La llegada del agua es crucial para iniciar la temporada de siembras y recuperar la vitalidad de sus tierras.
Discussion about this post