Manuel Benítez participó en la ceremonia ofrecida a Meche Carreño en Estados Unidos
IXTLÁN DEL RÍO.
La sólida amistad que unía a la recién fallecida actriz mexicana, Meche Carreño y el poeta y artística plástico de Ixtlán, José Manuel Benítez Espinosa, se vio reflejada anteayer durante la exequias que a ella le ofrecieron durante la celebración de vida e internación de cenizas, llevadas a cabo en Pasadena y en Hollywood Forever Cementery, California, Estados Unidos.
Y es que, como parte del homenaje póstumo que se le brindó a la Carreño, se leyó un afectivo poema escrito por Benítez, “de un solo impulso y con fluidez”, como lo comentó él mismo a este medio…
“A merced del Creador dejaste tus alas, Mercedes. Y llegaste al sendero de los que pueden volar por encima de la bruma, sin que el resplandor del sol hiriera tu sonrisa, tu respiración, tu amorosa voz. La pantalla gigante de este mundo se hizo pequeña para que pudieras estar aquí, con la gente sencilla, los amigos, la familia y el amoroso trajín de canes ancestrales, tu jardín de vida…
… Por eso eres tatuaje del viento, del celuloide de cada alma, desde siempre, hasta siempre. Sabemos que perdonaste nuestros los humanos errores, grandes y pequeños, porque sabías bien que el perdón es el ejercicio más poderoso del alma…
…Así que ahora que abordas la barcaza en este mar de silencios, vas tranquila, firme, fuerte, con la certeza de encontrarnos luego en el abrazo interminable, amoroso y pleno. Aquí, mientras, cuidaremos tus huellas… y tu paso imborrable, lo dejamos a merced del creador, el que impulsó tu especial existencia, Mercedes. Ve con el oleaje de esos mares que tanto amabas, con la espuma y el coro de gaviotas mientras la tarde arropa tus pensamientos vibrantes y profundos…
… Hoy no te alejas, porque eres permanente, porque somos parte de la película imborrable donde quisiste que estuviéramos para una charla eterna. Sí, estarás aquí en este murmullo de voces que desde ahora se levanta imponente, cómo el canto más glorioso que cruza tus cielos, tus mares y montañas, para que el creador abra su mansión y arrope tu ser para que nos lo muestre todos los días, como ahora, en nuestros corazones sempiternamente. Gracias por seguir estando. Hasta siempre, amorosa Mercedes”.
Esto es parte del poema que se leyó en los servicios funerarios en memoria de Meche Carreño y cuyo evento acudieron familiares, actores y actrices y muchas otras personalidades del mundo del histrionismo y en donde el profesor Manuel Benítez fue pieza importante, dada su estrecha relación con la actriz.
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