
Zona sur, nov. 21.- (Francisco J. Nieves Aguilar).- El olor a antojitos, tejuinos y aguas frescas, cocteles de fruta, dulces y cacahuates; un sábado no cualquiera, sino un sábado de descanso, familiar, fueron el marco para la realización del tradicional desfile de la revolución; esta vez con otros matices por celebrarse los primeros 100 años de esta gesta que cobró la vida de miles de mexicanos que allá por 1910 y años subsecuentes lucharon por la justicia, por la igualdad… por mejores niveles de vida.
Un sol y clima agradable vistieron el importante evento que de manera simultánea se efectuó en Ahuacatlán y en Amatlán de Cañas, Jala e Ixtlán del Río y al cual muchos presenciaron, por esparcimiento o por respeto, y hasta por convivencia familiar.
“Mira mami la chivita”, dijo una pequeñina que presenció el desfile en hombros de su papá, en Ahuacatlán. “Ah, son los niños de la maestra Julia”, señaló en tono fraternal el hombre; fue entonces que se escuchó un grito bajo los portales: “¡Viva el inicio de la revolución!”
Los desfiles del sábado, tanto en Ahuacatlán, como en Amatlán de Cañas, Jala e Ixtlán del Río, estuvieron muy concurridos. Vestidas con larguísimas faldas de gran vuelo, trenzas coronadas con moños tricolores y bonitas arracadas lucieron las damas. Pantalón y camisa de manta, sobrero de pico alto, escopetas o rifles portaban los varones con gallardía.
En el tercer desfile revolucionario que como presidente municipal de Ixtlán encabezó anteayer Héctor Javier Sánchez Fletes, dijo sentirse orgulloso y muy agradecido con todos los contingentes que en él participaron, en una fecha histórica, pletórica de civismo, deporte y cultura, quizás como nunca antes de había visto.
Por lo que toca a Jala, se cumplió con el cometido de exponer el trabajo de las instituciones culturales, deportivas y asociaciones civiles, sobre todo los grupos de instituciones y colonias que el ayuntamiento ha estado impulsando.
El presidente municipal Miguel González González, regidores y la mayoría de los directores de departamentos lo acompañaron desde el balcón principal del edificio municipal.
En Amatlán de Cañas, el desfile del 20 de Noviembre fue también muy lucido. Las instituciones educativas y demás organizaciones civiles respondieron positivamente a la convocatoria del alcalde, Arturo Becerra Tapia, quien así refrendó su buena relación con el sector educativo.
En Ahuacatlán la fiesta de la revolución continuó al caer la noche con un festival cultural, literario y deportivo que se efectuó en el exterior de la presidencia municipal, esto es por la inhabilitación de la Plaza de Toros El Recuerdo, como se acostumbra cada año.
Discussion about this post