Antes de pasar la vertiginosa página de las campañas electorales y sus resultados, consideramos que es importante enunciar algunos encuentros y desencuentros, disyuntivas y vicisitudes por las que tuvimos que atravesar para salir bien librados de los candidatos y de algunos usuarios del ciberespacio que, en la vorágine de la guerra sucia, llegaron a elucubrar de que en El Regional íbamos a granjearnos su favor publicando lo que querían ver; sea a favor, sea en contra.
Por ejemplo, dentro de los últimos días de la refriega electoral, el coordinador de la campaña de la candidata por Movimiento Ciudadano en Jala pidió que se eliminara una nota y un vídeo que ellos mismos pidieron se publicara al convocarnos a una rueda de prensa en la fonda de Doña Melba, petición que desde luego no concedimos. Con todo, fuimos condescendientes al no exhibir las veces que tuvimos que iniciar de cero la filmación por errores de quienes integraban la mesa.
Lo mismo pasó con la candidata de Nueva Alianza por el XVI distrito, quien nos mandó decir que si podíamos bajar el vídeo que ella misma grabó minutos antes de que iniciara la veda electoral. La respuesta fue la misma.
¡Y qué decir de la doctora Bibi!, a las 12:00 de la noche se le hizo una entrevista durante el último día de su campaña debido a que pedía aparecer en El Regional, aunque fue la primera de los candidatos de Jala en ser invitada durante los primeros días de mayo, dejándonos plantados y, sobre todo, sin realizar nunca una llamada de cortesía para pedir disculpas. El alegato fue su agenda, un plan de actividades que parece no respetar, del que no tiene control, y si de su tiempo no tiene orden, ¿se imaginan para ponerlo en la presidencia municipal? Nosotros le mandamos decir que hasta en una sentada en el baño podía reprogramar la entrevista mediante un mensaje de texto. Pero no, todo lo dejó para el último minuto. Cuando más saturados de trabajo estábamos.
La candidata del PAN por Ixtlán, igualmente nos canceló 3 veces la entrevista; pero al menos nos mandaba emisarios para disculparse, atendía llamadas y siempre demostró cortesía y respeto hacia nuestro medio. En reciprocidad, nosotros le abrimos las puertas, e incluso no caímos en el juego cuando dos personas la quisieron exhibir debido a infundios y, sobre todo, y a 48 horas de la jornada electoral, el de publicar una nota dónde con documentos en mano, se exhibía que su candidato a síndico, Güicho Morones, fue un funcionario que se aumentó el sueldo a 40 mil pesos, más que ningún otro director y percibiendo – según eso –, más que los regidores.
En cierto momento, nos enteramos que por el hecho de que nuestro director, Omar G. Nieves, acudió personalmente al cierre de campaña del doctor Víctor Cervantes y al de Jesús González “Carruy”, éste ya le estaba dando su apoyo a estos. Sin embargo, a todos los candidatos se les cubrió, y el motivo de que el director no haya podido estar en otros cierres de campaña obedeció a que tenía que trabajar en otras actividades.
Al fin terminó el barullo. Al fin se respira cierta tranquilidad porque los resultados ya están a la luz y los resentimientos solo quedan en quienes desconocen que la política es una disciplina que se rige por una moral diferente a la de las buenas costumbres. Se le llama ética de las responsabilidades, porque el político vela por los intereses de un grupo, de su partido, haciendo a un lado la moral propia, que ha sido calificada como ética de las convicciones.
Ahora, en El Regional seguimos agradeciendo su preferencia. En los últimos dos meses hemos recibido alertas de entre 20 y 30 ataques diarios y directos a nuestro sitio. Con todo y eso nuestra premisa seguirá siendo la misma: prestigio y pluralidad informativa.
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