Mojiganga, jaripeo y baile cerraron con broche de oro los festejos en honor a la Virgen del Refugio.
UZETA.
La comunidad de Uzeta, perteneciente al municipio de Ahuacatlán, celebró con entusiasmo y sin incidentes mayores sus tradicionales fiestas patronales en honor a la Virgen del Refugio, dejando un grato sabor de boca entre pobladores y visitantes.
Como cada año, las calles de este pintoresco poblado se vistieron de color, fe y alegría, culminando con la ya clásica y muy esperada mojiganga, una de las tradiciones más queridas por la comunidad.
Pero sin duda, la cereza del pastel fue el espectacular jaripeo, que encendió pasiones en la plaza de toros.
En este vibrante evento, destacaron las actuaciones de «Los Destructores, de Memo Ocampo», quienes pusieron a prueba a los valientes jinetes de la Hacienda Acayapan.
La tarde se llenó de adrenalina pura, de gritos, sustos, miedos, pero también de intensos aplausos y emociones vivas.
Y como si eso no fuera suficiente, la noche trajo consigo una dosis extra de energía con la presentación de la popular agrupación «Invierno Musical», que puso a todos a bailar sin parar en la cancha del pueblo. El ambiente fue contagioso, vital y profundamente alegre.
El resultado final: una fiesta redonda, tradicional y segura, que reafirma el espíritu hospitalario y festivo de Uzeta.
Un año más, la devoción por la Virgen del Refugio y la pasión por las tradiciones dejaron huella, consolidando a estas fiestas como uno de los eventos más esperados de la región.
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