- Cientos acompañan a los wixárikas que marchan en la ruta Aztlán – Tenochtitlán.
AHUACATLÁN.- A mediodía de este miércoles cientos de personas acompañaron a tribus wixárikas provenientes de distintos municipios de Nayarit para realizar el recorrido de la ruta “Aztlán – Tenochtitlán”.
En esta ciudad los indígenas hicieron un alto para visitar el sitio arqueológico ubicado en La Pitayera, en las faldas del volcán El Ceboruco.
En el lugar el maestro Rafael Díaz Mayorquín – organizador de la ruta – pidió al pueblo de Ahuacatlán que se una para que de manera pacífica plantee ante las autoridades federales el rescate del sitio conocido como Tonanitechi.
Dijo que aunque hay muchos caminos, el de la confrontación es el menos apropiado, indicando que la organización civil que él lidera ha recibido muchos apoyos por parte del INAH, del CONACULTA y otras dependencias federales y estatales gracias a que ha mantenido un trato cordial con sus titulares.
Tras llevar a cabo los honores a la bandera y cantar el himno nacional, los ‘marakames’ hicieron un ritual en donde pasaban una pluma por el cuerpo de sus hermanos a fin de quitarles el cansancio por la caminata que están llevando a cabo. Acto seguido hicieron lo mismo con algunos asistentes que se formaron para que se les hiciera una purificación.
En el micrófono una mujer llevó a cabo una procesión para invocar a los seres de luz y ponerse en contacto con la naturaleza. Pidió a todos que se descalzaran, hicieran un círculo, apagaron los celulares y sintieran “el amor” y “la gratitud” en cada inspiración y exhalación. Cantaron y reflexionaron en todo lo que se ha perdido por causa de la tecnología mal empleada. Sobre todo en los niños.
En representación del Colectivo Tonanitechi, Miguel Ángel Aguiar expresó que es importante continuar con las acciones tendientes a rescatar el sitio arqueológico. Manifestó su preocupación por que este sea destruido y pidió a los ahuacatlenses que se solidaricen con esta causa.
Al final, el arqueólogo Jorge Beltrán ofreció una amplia explicación de lo que se ha descubierto y lo que falta por hacer. Enfatizó que en el lugar existe una necrópolis o panteón prehispánico de donde se han rescatado 100 cuerpos de nuestros ancestros.
Informó que el área hasta donde ahora han encontrado vestigios consta de 9 hectáreas. Una parte donde las edificaciones datan de dos mil años atrás, y otra más desarrollada de mil años de antigüedad. Es decir, que hubo dos culturas asentadas.
En donde está detenida la obra de la autopista Jala – Puerto Vallarta (lugar dónde se llevó el acto), existió una plaza ceremonial, pero hay otra parte donde se han detectado varios montículos y zonas habitacionales.
El arqueólogo apuntó que si esta generación no puede rescatar el sitio arqueológico, se tendría que tapar con tierra algunas ruinas encontradas a fin de preservarlas para que otra generación en el futuro lo pueda hacer.
Previo a la visita en Ahuacatlán, los huicholes estuvieron en la zona arqueológica de Los Toriles en Ixtlán y terminarían la jornada en La Estancia de Los López, en un lugar conocido como “Las cuatro Vírgenes”.
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