La distinguida señora apunta que apoyará las aspiraciones políticas del ex presidente.
Ixtlán del Río, febrero 07.- (Francisco J. Nieves Aguilar).- “Porque lo conozco, porque sé de su honestidad y su gran cariño por Ixtlán del Río; por eso comparto el proyecto de cambio que impulsa mi amigo “Chato” Muñoz, y con gusto lo acompañaré en su aspiración, porque yo también quiero ver un verdadero cambio que impulse el desarrollo del municipio y que vea al mismo tiempo por los más necesitados”.
Consuelo Iglesias de Hudson, ex-Presidenta del “Club Ixtlán en Los Ángeles” — ejemplo de mujer y ciudadana que sin estar viviendo en su terruño o incorporada a alguna administración municipal, ha estado trabajando desde hace más de 15 años por el beneficio de Ixtlán del Río–, nos participa su enorme gusto de compartir la inquietud del profesor Salvador Muñoz Hernández de volver a servir a los ixtlenses, y vierte éstos comentarios ante un servidor a un costado del Jardín Principal.
“Yo –dice la señora Chelo– quedé muy complacida con la gran labor que realizó el maestro cuando estuvo al frente de la administración municipal, y mis compañeros del club trabajamos incansablemente junto con él para traerle muchos beneficios a la población”.
Con su acostumbrada sencillez, la señora Iglesias cita como ejemplo la donación de una importante cantidad de dólares para la construcción de la Unidad Académica del Sur de Nayarit, la entrega de gran cantidad de muletas, andaderas y sillas de ruedas para personas con discapacidad, el apoyo a programa de becas que se impulsó desde el ayuntamiento, la donación de despensas a familias en extrema pobreza y en fin, muchos apoyos para la gente de Ixtlán.
Y concluye diciendo: “Ojalá y que el proyecto de nuestro amigo se vuelva a cristalizar, y veremos de nueva cuenta como cambian las cosas en Ixtlán, e invito a toda la población a impulsar la aspiración legítima y genuina de servir a los ixtlenses del “Chato” Muñoz, porque en honor a la verdad es urgente un cambio en todos los órdenes y sólo con él y con nuestra participación se puede lograr el cambio verdadero que él nos plantea. Y como reza el refrán, más vale malo por conocido, que bueno por conocer”.
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