AHUACATLÁN.- A pesar de los pesares, de las trabas que interpusieron algunas personas y de las posturas posesivas asumidas por otros, la peregrinación que en este 2015 se realizó a Talpa de Allende, Jalisco, cumplió con su cometido. O al menos así lo aseguró Lidia Vargas, una de las integrantes del comité organizador.
El mayor mérito, obvio, es para los peregrinos que se desplazaron a pie. ¡Cinco días caminando!, sorteando cada obstáculo, soportando caídas, cansancio en los pies, ampollas, además, claro, del mal tiempo. Frío, hambre, sed.
Las peripecias sin embargo iniciaron desde días antes de iniciar el peregrinar pues había que organizar una serie de cosas para que el recorrido se realizara con menos incidentes, como el traslado de equipajes y víveres, el ofrecimiento de la misa, alimentos, botiquín de primeros auxilios, apoyo vial, etc..
Por eso el comité organizador anduvo gestionando aquí y allá, tocó puertas en este, en aquel y en otro lado para llegar a la meta y dar gracias a la virgen de Talpa por los favores recibidos.
En la organización de esta peregrinación, además de Lidia Ramos, participaron también y con mucho entusiasmo, Tikito Ramos y Chuy Sojo, Héctor Golláz y Gloria Nieves, así como los hermanos Ramón, Emerita y Guillermina Ramos.
Pero es menester destacar el apoyo de algunas otras personas, como es el caso del presidente municipal Chuyín Bernal y de su esposa Érika Llamas, quienes a título personal apoyaron con la comida, al igual que la señora Adelina.
También aportaron su granito de arena los regidores Teresa Villasana, Chon Peña y Mary Robles, a quienes el comité organizador les agradece públicamente este apoyo, así como a todos los peregrinos que este 2015 acudieron hasta Talpa de Allende para venerar a la virgen.
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