Con la mente despejada, es hora de ejercer nuestro derecho al voto.
MEXICO.
Finalmente, gracias a Dios, terminaron las campañas políticas. También llegó a su fin el torneo nacional de futbol, con América coronándose campeón por decimoquinta ocasión.
Ahora, con la mente un poco más despejada, las noticias de la tele y los posteos políticos en las redes sociales no nos atraen tanto como antes.
Las encuestas, a partir de ayer, se han vuelto irrelevantes.
Sin duda, muchos quedaron hartos de los comentarios en Facebook, y para colmo de males, a escasos tres días de las elecciones, aún no saben por quién votar.
Sin embargo, no podemos desentendernos de algo tan fundamental para el país, para el estado y para nuestro municipio. Sería una irresponsabilidad inaudita, como huir de una cita que inevitablemente debemos cumplir.
La neurosis que, debido a las elecciones de este domingo 2 de junio, agobia a los Nayaritas, pronto acabará. Terminaron las campañas, y durante todo el mes de mayo vimos el “altruismo” de los candidatos aflorar.
Cuando alguien se encuentra en la oscuridad, solo tiene dos opciones: maldecir la oscuridad o encender una luz. Hay que encender esa luz.
Por eso, agotada la sobredosis de campaña que nos impusieron y después de haber dicho lo que tenían que decir y hasta lo que no, los señores candidatos deben ceder el escenario a los verdaderos protagonistas de estas elecciones.
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