Francisco Javier Nieves Aguilar
Me enfilo sobre la avenida Hidalgo y observo el trajín comercial de la ciudad. Gentes que entran y salen, que van y vienen, que conversan entre sí… Diviso a Managüito y a la señora Luz supervisando la instalación del gigantesco nacimiento y del árbol de la ilusión. Obreros que suben y bajan escaleras. Bancos y casas de cambios repletas de clientes, hileras en los cajeros automáticos, señoras cargando bolsas y bolsas de mandado.
No parece haber crisis, todo mundo parece ocupado. Se acerca Navidad y cada quien se apresta a celebrarla a su manera… Posadas, dulces y piñatas, música y baile. Me siento en la banca de concreto, extiendo la mano para saludar a unos amigos. Llega una camioneta y se van. Me llevo las manos a la barbilla y pienso… reflexiono: ¿Qué es la Navidad?
Navidad, pienso yo, es un presente, no un pasado.
Navidad no es una fecha histórica a recordar, sino un presente que hay que vivir:
Cuando decides amar a los que te rodean, ¡Ese día es Navidad!
Cuando decides dar un paso de reconciliación con el que te ha ofendido, ¡Ese día es Navidad!
Cuando te encuentras con alguien que te pide ayuda y lo socorres, ¡Ese día es Navidad!
Cuando te tomas el tiempo para charlar con los que están solos, ¡Ese día es Navidad!
Cuando comprendes que los rencores pueden ser transformados a través del perdón, ¡Ese día es Navidad!
Cuando te desprendes aún de lo que necesitas, para dar a los que menos tienen, ¡Ese día es Navidad!
Cuando renuncias al materialismo y al consumismo, ¡Ese día es Navidad!
Cuando eliges vivir en la alegría y la esperanza, ¡Ese día es Navidad!
¡CUANDO INYECTAS ALEGRÍA A TU HIJO POR LA DONACIÓN DE UN ORGANO, ¡ESE DIA ES NAVIDAD!… Y MI NAVIDAD LLEGÓ HACE YA CASI UN AÑO, EL 19 DE ENERO PASADO PARA SER EXACTOS; ¡BENDITA NAVIDAD!
Discussion about this post