AHUACATLÁN. – El fuerte aguacero que durante la noche azotó a la zona sur del estado, mantuvo en alerta al personal de Protección Civil de los municipios de Ahuacatlán, Jala e Ixtlán del Río.
Con la lluvia se vino abajo la loseta de algunos techos y se taponaron varias alcantarillas pues el agua arrastró troncos, ramas, botes y botellas, carrizos y palizadas, etc.
Y uno de los puntos que más alarma causó fue el arroyo de Jala en su cruce con la carretera Internacional, a escasos metros del Rancho de Romero y en donde el agua se desbordó debido a un taponamiento que se generó en ese lugar.
Los más afectados en este caso fueron los dueños de una cachimba identificada con la razón social “La Curva”, quienes sufrieron la pérdida de gran parte de su patrimonio toda vez que el agua y el lodo se colaron hasta el fondo dejando un ambiente desastroso.
El agua, al interrumpirse su cauce buscó las salidas por lo que también inundó los caminos y acotamientos cercanos al Rancho de Romero, así como a los potreros adyacentes a la mencionada cachimba.
Ante esta situación se solicitó la presencia del personal de la Dirección Municipal de Protección Civil de Ahuacatlán, pero también fue necesaria el apoyo extra oficial para realizar en calidad de urgente las labores de desazolve.
Y bueno, tanto en Ixtlán como en Jala y en Ahuacatlán los trabajadores de esta dependencia tuvieron que redoblar esfuerzos para destapar rejas y alcantarillas pluviales; esto es en previsión de nuevos aguaceros.
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