AHUACATLÁN.- Pasan los trienios, un alcalde y otro, proyectos distintos que se ponen en la mesa de negociación, y mientras tanto, el deterioro de uno de los primeros cuadros de la ciudad, al menos el primero con que se encuentran los turistas, sigue desentonando con el progreso que debería haber en Ahuacatlán. Y no solo eso, en los últimos dos meses se informó de dos mujeres que han dado traspiés entre los vetustos mosaicos que se levantan en el susodicho Parque Morelos.
De cuando Agustín Aguilar estuvo al frente de la administración pública hubo intentos por rehabilitar el piso, instalar los servicios urbanos y reubicar a los puestos de vendimias. Nada prosperó.
Por una parte, los comerciantes viéndose afectados se han resistido a esta remodelación, inclusive cuando ésta ya ha sido aprobada por las instancias correspondientes, como en el caso del gobierno pasado de Chuyín Bernal, quién expuso el plan ante la ciudadanía en unas lonas en la misma plaza.
El proyecto contemplaba una remodelación integral donde los puestos tendrían un espacio en la vía pública para continuar operando. No obstante, durante décadas se ha permitido que unos cuantos comerciantes mantengan el monopolio de los espacios públicos, llegando al grado de que hay personas que tienen dos o más puestos, los cuales rentan y hacen más jugosas sus ganancias.
Pero eso no es todo. Otro obstáculo más que han tenido que sortear las autoridades es la renuencia de algunos vecinos quienes acostumbrados a ver los puestos tal como están hoy, se oponen a que se implementen los cambios para mejorar la imagen urbana. Tal como ocurrió con el bulevar, que se ha hecho en pegotes y a base de muchos contratiempos.
Ahora el presidente tiene en puerta la remodelación del antiguo Portal Quemado y la avenida 20 de Noviembre; proyectos que requieren del apoyo de la comunidad, en tanto llega alguien con determinación, y dispuesto a pagar el costo político que implica la rehabilitación del Parque Morelos.
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