Un tesoro oculto en Nayarit.
JALA.
Pocos aventureros conocen el secreto mejor guardado de la Geografía de Jala, a tan solo 68 kilómetros de la bulliciosa capital nayarita, Tepic.
Nos referimos al pintoresco poblado de Jomulco, una joya escondida que cautiva a quienes tienen la fortuna de visitarlo.
Ubicado entre calles estrechas y callejones sinuosos, Jomulco es mucho más que un simple lugar en el mapa. Es una comunidad vibrante y unida, donde la esencia de hombres y mujeres trabajadores impregna cada rincón.
La fuerza de esta tierra se revela aún más cuando enfrenta cualquier amenaza, fortaleciendo los lazos que la unen.
Jomulco se erige como cuna de artesanos, donde hábiles manos tejen sillas y sillones, mecedoras y chiquihuites, canastos y figuras elaboradas con destreza a partir de palma o hojas de maíz.
La tradición de la artesanía fluye en cada taller, transmitiendo generación tras generación el arte ancestral que distingue a esta comunidad.
Además, Jomulco alberga curanderos que aplican técnicas ancestrales, custodios de saberes que han pasado de boca en boca a lo largo de los años.
La espiritualidad y la conexión con las raíces son valores arraigados en este rincón de Nayarit.
La promoción y defensa de las costumbres y tradiciones no sería completa sin mencionar a figuras destacadas como el profesor Fredy Perales, un incansable promotor cultural que se dedica a preservar la identidad única de Jomulco. Su dedicación y liderazgo son un faro que ilumina el camino hacia la conservación de la riqueza cultural del lugar.
Entre aquellos que trabajan por elevar la calidad de vida de los habitantes destaca el actual delegado, Gerardo Cárdenas, comprometido con el progreso y el bienestar de la comunidad.
Además, figuras como Jesús Ibarra, desde los Estados Unidos, impulsan apoyos para sus coterráneos, demostrando que el espíritu emprendedor de Jomulco trasciende fronteras.
El profesor Salvador Fregoso, con su visión de futuro, contribuye al desarrollo de un pueblo arraigado en sus tradiciones.
Este compromiso con el porvenir refleja la dualidad de Jomulco: una tierra que mira al futuro sin olvidar sus raíces.
La calidez de su gente se fusiona con una gastronomía rica en sabores auténticos que despiertan los sentidos.
En Jomulco, cada platillo es una manifestación de amor por la vida y un reflejo de la identidad que caracteriza a esta comunidad.
En resumen, Jomulco no es solo un lugar en el mapa, sino una experiencia que va más allá de las palabras. Es vida, es amor, es historia y tradición.
Este tesoro oculto en Nayarit espera a ser descubierto por aquellos que buscan sumergirse en la autenticidad de una comunidad que guarda con orgullo sus raíces.
Discussion about this post