ZONA SUR
José Luis Andrade llego apurado a su casa. Un fuerte dolor de estomago lo ataco de pronto. A los cinco minutos tuvo que acudir al baño porque “ya le andaba”. Pero además, empezó a sentir severos mareos, mientras que un dolor de huesos invadía su cuerpo.
Algo parecido ocurrió con la señora Ana –de la colonia Demetrio Vallejo de Ahuacatlán– quien se levantó de súbito de su cama en plena madrugada. Unos retortijones y el “gorgorear” de su intestino la obligaron a ir al baño de inmediato. El Eskapar le ayudó un poquito, pero la intensa diarrea continuó hasta el día siguiente.
Y aunque no ha sido confirmado todo parece indicar que fueron atacadas por un agente infeccioso. Lo extraño del caso es que en su mayoría son personas adultas las que han sido infectadas por esta enfermedad.
Esta situación ha provocado una gran preocupación entre todas las familias. Hay alerta dado que no es muy fácil acabar con este virus que ha propagado fácilmente en el sur.
Ta fuerte es la infección que algunos de ellos incluso han permanecido hasta dos o tres semanas hospitalizados y bajo u estricto tratamiento médico, obligando a los doctores a suministrarle algún suero y otro tipo de agentes vitamínicos para evitar una deshidratación.
Por ello, y como una medida meramente preventiva las autoridades de salud siguen recomendando a las familias adoptar ciertas medidas de higienes, muchas de las cuales ya las conocemos, como son lavarse bien las manos, hervir el agua para alimentos, lavar bien frutas y verduras y evitar ingerir alimentos en puestos callejeros o que estén a la intemperie.
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