AHUACATLÁN-AMATLÁN.
Con las lluvias y el exceso de humedad la carretera Ahuacatlán – Amatlán de Cañas se ha tornado bastante peligrosa; por eso es que las corporaciones de seguridad tanto de Ahuacatlán como de Amatlán de Cañas e incluso del estado, alertan a los automovilistas a manejar con precaución.
Y es que el reblandecimiento de la tierra ha ocasionado a su vez deslaves y derrumbes en distintas zonas de la carretera; aunque el tramo más peligroso inicia en el kilómetro 7, hasta llegar al 18; pero hay puntos donde las piedras y la tierra la mantienen parcialmente obstruida; y esto se torna por lo tanto más peligroso en las curvas y bajadas.
Los ayuntamientos de Ahuacatlán y de Amatlán de Cañas han hecho todo lo humanamente posible por limpiar la carretera; pero más tardan en retirar piedras y tierra cuando ya apareció un nuevo deslave.
Los cerros fácilmente se desgajan con la humedad y hacen que las piedras rueden hasta caer sobre el pavimento. Y a veces no son ni pequeñas, sino grandes rocas, tal y como ocurrió el pasado fin de semana en el que incluso se formó un río de piedras que fluían por la carretera. Afortunadamente, las direcciones de Protección Ciudadana de Ahuacatlán y de Amatlán actuaron de inmediato para retirarlas y así permitir el flujo de vehículos.
En resumidas cuentas, desplazarse por ahora sobre la carretera Ahuacatlán – Amatlán de Cañas no es muy cómodo. Hay que sortear todos los obstáculos que se van presentando en el camino: pavimento húmedo, resbaladizo, curvas pronunciadas, derrumbes, y en fin. Los riesgos de sufrir un accidente están latentes durante todo el trayecto. Por eso es que se hace un llamado a los automovilistas para que tomen sus precauciones.
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