AHUACATLÁN. – “Hay cuerpo”, se escuchó decir esta mañana en un diálogo que sostenían dos fulanos bajo los portales de la presidencia municipal, dando a entender con ello el fallecimiento de una persona; y por ser un pueblo chico, la noticia se extendió rápidamente por los cuatro sectores de la población.
Y efectivamente, los habitantes de Ahuacatlán conocieron este jueves la triste noticia relacionada con el deceso de Juan Manuel Marmolejo Aguilar, acaecido durante las primeras horas tras una complicación orgánica.
Juan, de 52 años, está siendo velado esta noche en su domicilio de la calle Matamoros No 194, justo en su cruce con 16 de septiembre del populoso barrio de La Presa.
Su fallecimiento en realidad tuvo su origen en una insuficiencia renal, misma que de pronto se complicó, pese a los esfuerzos de los médicos.
Este mismo día se suscitó el fallecimiento de don Pedro Zepeda Guzmán, quien murió de “muerte natural”, derivada de su avanzada edad. Su capilla ardiente fue montada en la Funeraria Bañuelos y ambos serán sepultados mañana viernes en el panteón municipal.
En la víspera se habían sepultado los restos de la señora Elisa López Sida, quien a su vez venía enfrentando también una serie de complicaciones orgánicas que los médicos no pudieron resolver, pero deja a su familia muchos valores positivos, como la honradez y la humildad. DESCANSEN EN PAZ.
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