JALA.- Sucede cada tres años. Funcionarios y empleados municipales que se enfrentan a la incertidumbre por su futuro inmediato. La mayoría de ellos sufren noches de insomnio pensando en lo que le espera a partir del 18 de septiembre próximo.
Algunos albergan la esperanza de “repetir color” y para ello intentan desesperadamente entrevistarse con el presidente municipal electo y así plantear la posibilidad de continuar ofreciendo sus servicios en el próximo Ayuntamiento.
Pero en Jala tal parece que las perspectivas de que algunos servidores públicos de primer o segundo nivel repitan en sus cargos, han quedado restringidas; esto es debido a las posturas radicales de las autoridades salientes y entrantes. Seguramente el alcalde electo, Mario Villarreal, se hará rodear de gente nueva.
Sin embargo nada hay escrito aún. Todo ha sido especulaciones, suposiciones. E incluso el propio Mario, en su más reciente entrevista para el Regional del Sur aseguró que su equipo de colaboradores lo dará a conocer hasta el 18 de septiembre, una vez que asuma el poder.
Empero, se habla de Luís Alberto Zúñiga Benítez, César Jacobo Solís, Elvia López Mendiola, Delio Mendoza Díaz, Teresita de Jesús López Jacobo, Marisela Magallanes Enrírquez, Teresa Savalza y el profesor Baltasar Pérez Gómez.
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