El alcalde busca consolidar un equipo eficiente y comprometido con el proyecto de gobierno municipal.
IXTLÁN DEL RÍO.
La estabilidad en el Ayuntamiento de Ixtlán pende de un hilo para algunos funcionarios de primer nivel pues, la directriz del presidente municipal es clara: quien no entienda ni respalde plenamente el proyecto de gobierno, será reemplazado.
No hay espacio para la improvisación ni para el desempeño mediocre en una administración que busca resultados tangibles.
Desde hace semanas, en los pasillos del gobierno municipal se respira un ambiente de evaluación constante. Algunos directores ya están bajo foco rojo y podrían ser relevados en cualquier momento.
La reciente sustitución del titular del OMAPSI (Organismo Municipal de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento de Ixtlán) es un mensaje contundente: nadie tiene asegurado su puesto si no cumple con los estándares de eficiencia y compromiso que exige el actual gobierno.
«Queremos un equipo que entienda el rumbo, no que estorbe el camino«, habría expresado el alcalde en reuniones internas, según fuentes cercanas al cabildo.
La intención es optimizar el funcionamiento del Ayuntamiento y responder con eficacia a las demandas ciudadanas.
Afortunadamente, la lista de funcionarios señalados por su bajo rendimiento es reducida, pero eso no los exime del escrutinio.
Las decisiones se están tomando con base en resultados concretos, y aquellos que no demuestren avances pueden irse despidiendo.
Este movimiento forma parte de una estrategia más amplia para fortalecer la administración y asegurar que todos los elementos de gobierno estén alineados con los objetivos municipales.
El mensaje es claro y firme: servir con responsabilidad o ceder el lugar a quien sí lo hará.
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