AHUACATLÁN.
Desde las cinco hasta las siete de la mañanahan estado arribando los primeros peregrinos de Ahuacatlán que se desplazaron hasta Talpa de Allende, Jalisco. La travesía que inició en los primeros minutos del pasado viernes transcurrió con relativa pasividad, aunque en la primera jornada se reportó un incidente ocurrido a una mujer, quien resultó con fractura de tobillo, situación que orilló a sus familiares a suspender la caminata y trasladarla a la ciudad de Tepic, para una intervención quirúrgica. Fuera de ahí, todo ha sido “calma”, pero entre comillas.
Y es que, el cansancio y las ampollas han debilitados sus cuerpos; aunque la fe por la virgen es superior a todo, siendo por supuesto importante la asistencia del personal de apoyo hacia aquellos que lo han requerido, algunos de los cuales llegarán a Talpa con los pies y rodillas inflamados, dolor de espalda y en fin.
El pasado domingo reposaron en San Sebastián del Oeste. Los alimentos de ese día corrieron por cuenta del gobierno de Ahuacatlán. Ayer lunes arribaron a El Atajo y este lunes han estado llegando a su destino final, es decir, a Talpa, donde se habrán de incorporar los peregrinos que se trasladan en bicicletas, en motos, caballos o en autos.
No menos de 500 peregrinos son los que se estima visiten hoy martes a la virgen de Talpa, como curre cada año por estas mismas fechas. Algunos reposarán unas cuantas horas en aquel Pueblo Mágico para regresar a Ahuacatlán ya por la noche, pero seguro aprovecharán para comprar los tradicionales rollos de guayabate y los chicles.
Otros dormirán ahí en Talpa previendo volver a su tierra mañana miércoles… La tradición sigue, sigue y sigue.
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