Una insuficiencia renal crónica fue minando sus fuerzas desde hace más de una década. Enfrentó la adversidad con optimismo mientras se encontraba en hemodiálisis.
EL AHUALAMO.
Cientos de personas fueron las que se sumaron este martes y miércoles al velorio y sepelio de Paula Koraima Hernández, quien lamentablemente perdió la batalla contra la muerte para dejar en sus padres, hermanos y demás familiares una enorme tristeza, luto y dolor.
De algunos 30 años, Koraima simple y sencillamente fue una guerrera; una mujer que enfrentó adversidades constantes producto de una insuficiencia renal crónica que la atacó cuando frisaba apenas en los 18 años.
Idas y vueltas de El Ahualamo hasta Tepic para ser sometida a sesiones de hemodiálisis. Tres veces por semana. Luego la misma rutina, pero en una clínica de Ixtlán. Siempre luchando contra esta complicada enfermedad de la IRC.
Esos lastimosos y tediosos tratamientos fueron minando sus fuerzas. Su cuerpo se deterioró paulatinamente. No obstante, ella siempre “le echó ganas” y, ante cualquier complicación, sacaba fuerzas de donde fuera aferrándose a la vida.
No solo eso, pues, a pesar de todo ello, Koraima proyectaba una imagen optimista e incluso inyectaba ánimo a sus compañeros que, al igual que ella, también están siendo presas de la insuficiencia renal.
Una de ellas fue mi esposa. Por eso mi familia comparte con la de ella su dolor; aunque nos reconforta saber que ambas ya se reencontraron en otro mundo y seguro están gozando de las bromas de Paula.
Ella falleció anteayer por la mañana, siendo velada en su domicilio de la calle 31 de diciembre de este poblado, perteneciente al municipio de Santa María del Oro. Ayer la sepultaron después de la misa de cuerpo presente que se efectuó en el templo de la localidad; pero fueron decenas de personas las que participaron en el cortejo fúnebre que finalizó en el panteón, donde ya descansa en paz.
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