ROSA BLANCA.— “Las fiestas populares son parte de nuestra historia porque en ellas encontramos elementos del pasado; desde la comida que se vende, hasta los concursos de reinas y los carros alegóricos”. Así fue como se expresó el presidente Carlos Carrillo tras su regreso de la comunidad de Rosa Blanca a donde acudió para encabezar el rompimiento de la feria… la Feria del Durazno.
Pese a la amenaza de una tormenta y una llovizna, que posteriormente se dejó sentir, el primer edil, acompañado por algunos de sus colaboradores, se apersonó en aquel pintoresco poblado que se encuentra enclavado en la Meseta de Juanacatlán con la finalidad de participar en el arranque de sus fiestas, en honor a Santa Rosa de Lima.
De Los Aguajes y de La Cofradía, de Francisco I. Madero y de Pueblo Nuevo, de Jala y de Jomulco y hasta de Ixtlán del Río llegaron gentes a esta localidad de Rosa Blanca para sumarse a este inicio de Fiestas, en una tarde noche de regocijo y alegría.
Carlos Carrillo y su comitiva acompañaron a las autoridades del lugar para iniciar el recorrido por la calle principal para detener posteriormente su marcha en la pequeña plazoleta.
En ese mismo tenor, el presidente giró instrucciones a la Dirección de Seguridad a efecto de que se mantenga muy bien vigilada la población durante sus fiestas patronales.
La Feria del Durazno –o fiestas patronales– tiene su punto culminante el 23 de agosto. Para esa fecha sus habitantes ya habrán elegido a su reina, en un certamen previsto para este martes 21 de agosto con la participación de tres candidatas.
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