JALA.- El Cavalier verde se estremeció todito mientras que sus ocupantes se sobresaltaron al sentir el golpe seco. El conductor, en tanto, casi pierde el control y a punto estuvo de subirse al camellón. Afortunadamente las cosas no pasaron a mayores.
La causa de este inesperado incidente fue el enorme bache que emerge justo en el crucero de Jala, al dar vuelta hacia la carretera que conduce a ese pueblo mágico. Afortunadamente era de día, pero si hubiese sucedido de noche quizás estuviéramos hablando de otra cosa.
Desde luego que no es ésta la única familia que ha sufrido un percance por culpa de este bache, sino que han sido decenas, pero obviamente el asunto se complica durante las noches dado que no es fácil detectarlo toda vez que se ubica exactamente al dar vuelta hacia la izquierda si se toma como referencia la circulación por la carretera internacional, de norte a sur.
Se trata de un enorme bache de dos o tres metros de circunferencia, profundo; y no han sido pocos los vehículos que han resultado afectados de la suspensión por culpa de ello.
En tal razón, no son pocos los choferes que están pidiendo a gritos la intervención de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes o de la instancia correspondiente a efecto de que se proceda a taparlo.
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